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Crónica de un paro agrominero en Antioquia
Colectivo Brecha / Lunes 2 de septiembre de 2013
 

A partir del 18 de agosto las comunidades campesinas de Segovia y Remedios en el departamento de Antioquia decidieron concentrarse en el coliseo del municipio de Segovia con el objetivo de participar en el Paro Nacional Agrario y Popular, allí llegaron más de 2 mil personas de muchas veredas de esta parte del Nordeste Antioqueño en su mayoría mineros que también trabajan la tierra con la agricultura y la ganadería.

Esa misma noche ya muy cerca de la hora cero del paro programada a nivel nacional las comunidades decidieron salir a reclamar sus derechos de manera pacifica a la vía principal del pueblo donde fueron violentamente reprimidos por la policía que ataco a los manifestantes con fusilería, gases lacrimógenos y granadas aturdidoras propiciando un enfrentamiento que se prolongo hasta la madrugada y dejo varios heridos entre ellos un campesino por impacto de arma de fuego. La noche del 19 de agosto los enfrentamientos fueron aun mas fuertes con la llegada de unidades del ESMAD por vía aérea al municipio, estos abrieron fuego indiscriminadamente contra la población y los manifestantes elevando el nivel de la confrontación, además, intentaron atacar el Refugio Humanitario acompañados de civiles armados presumiblemente paramilitares siendo repelidos por las comunidades indignadas que lograron mantener a salvo el lugar de concentración que estaba lleno de mujeres, niños y personas de la tercera edad, muchos de ellos fueron afectados por los gases.

Al siguiente día se realizo una reunión entre las autoridades civiles y militares del municipio y los líderes de la protesta constituyendo la Mesa de Interlocución y Acuerdo del municipio de Segovia que logro en tiempo record una reunión con las autoridades del departamento pactando una reunión dos días después en la ciudad de Medellín con el gobernador Sergio Fajardo, por ello el 20 de agosto se realizo una marcha por la paz en el municipio de Segovia que conto con la participación de miles de habitantes del municipio, los manifestantes que se encontraban en el coliseo y el alcalde del municipio, esta marcha termino en la plaza central con un acto politico.

La reunión pactada en la gobernación de Antioquia no fue muy fructífera, el gobernador nunca llegó, demostrando su desprecio por las comunidades, los que si se hicieron presentes fueron los militares que pretenden darle tratamiento de guerra a toda protesta civil y pacifica, los ministros tampoco se hicieron presentes y todo este acumulado de irrespeto hacia el campesinado derivo en el levantamiento de la mesa en las horas de la tarde, inmediatamente se reanudaron las actividades de paro y decidieron desplazarse hacia Barbosa Antioquia para ejercer mayor presión al gobernador y poder juntar las luchas que venían desarrollando varias comunidades en todo el departamento.

Durante el traslado en una caravana de mas de 30 buses la policía obstaculizo todo el tiempo el paso con retenes, requisas y empadronamientos incluso pretendieron amedrentar a la prensa y defensores de derechos humanos; todo con el objetivo claro de sabotear el desplazamiento de los manifestantes. Las comunidades del Bajo Cauca, el Alto Sinu y otras partes del Nordeste Antioqueño también denunciaron la actuación de las autoridades en las carreteras en las cuales les quitaron mercado, ollas, machetes y hasta sus maletas se las robaron las autoridades, los obligaron a caminar durante horas pues inmovilizaban los buses y amedrentaban a los conductores.

Finalmente lograron reunirse mas de 5 mil personas en la villa olímpica del municipio de Barbosa, llegaban de a miles y provocaba el bullicio y la alegria de los que ya llevaban varios días acampando en el lugar, las comunidades concentradas se declararon en Campamento de Refugio Humanitario y sostuvieron reuniones con las autoridades locales las cueles se comprometieron a proteger el campamento y a brindarle toda la ayuda humanitaria que estas necesitaran, el cuerpo de bomberos del municipio de Barbosa ayudo mucho, también el hospital, la secretaria de gobierno también colaboro y se recibió mucho apoyo por parte de los comerciantes y muchas personas del pueblo también se acercaron a colaborar con pequeñas donaciones, a pesar de la dramática situación los manifestantes se encontraban bien de salud, comían bien y contaban con todos los servicios para asearse, hacer sus necesidades y mantenerse comunicados.

Esta situación cambio dramáticamente cuando el ESMAD junto a pandilleros y paramilitares atacaron el Refugio Humanitario con granadas aturdidoras, gases lacrimógenos, municiones recalzadas, balas de fusil, cocteles molotov y piedras. Miles de personas entraron en pánico, mujeres, niños y personas de la tercera edad resultaron gravemente afectados por los gases pues la policía disparo hacia las cocinas, las carpas y los plásticos que los protegen del frio. Los pandilleros y paramilitares arrojaban rocas y cocteles molotov hacia adentro resultando en cambuches quemados y decenas de heridos por pedradas, además dañaron e incendiaron vehículos que se encontraban en la via; la situación mas tensionante se dio cuando un carabinero de la policía disparo contra un campesino que resistía la agresión y lo impacto en las dos piernas con un tiro de fusil, esta situación produjo la indignación generalizada de la comunidad que ahuyento a los agresores inmediatamente, el saldo de de la violenta agresión fue de 17 heridos uno por bala de fusil, cientos de afectados por los gases, perdidas materiales para los manifestantes y 4 vehiculos quemados y varios mas averiados.

Las comunidades se mantienen en resistencia en el municipio de Barbosa y dia a dia se fortalece el Paro Nacional Agrario y Popular en todo el país, la petición que hacen es muy simple, exigen la instalación de una Mea de Interlocución y Acuerdo Nacional en la cual se discutan los temas fundamentales que preocupan al sector campesino y minero, allí se debe hablar del libre comercio, de la gran minería, de la inversión social en el campo, de las zonas de reserva campesina y otros temas que aquejan a las comunidades rurales, la respuesta del gobierno ha sido negar la existencia de la movilización mas grande de los últimos tiempos, darle tratamiento de guerra a la manifestación pacifica y sacar el ejercito a las calles para atacar al pueblo en resistencia.

Olvidan los que gobiernan que llevan 50 años haciendo lo mismo con la bayonetas y los bombardeos contra las comunidades y no han podido humillar este pueblo, el presidente no solo enfrenta este problema, constantemente tiene reveses militares en todo el país y también mantiene un proceso de paz con la insurgencia en Cuba, ademas, enfrenta una evidente crisis económica y del sistema mismo de producción, las bandas criminales producto de la desmovilización ficticia de los paramilitares se le salen de las manos e incluso sectores del ejercito comienzan a rebelarse, miope visión histórica la de Santos si no se da cuenta que es el momento de hacer la paz entregándole al pueblo lo que históricamente le ha sido negado, podría evitar mucha violencia y muerte si recapacita el y su clase social para entregar el poder a las mayorías históricamente excluidas, solo hay que ser sensato.

Agrominera de Noroccidente y el Magdalena Medio

Colectivo Brecha