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Al atardecer del año 2013, se escuchan en Colombia clamores por la concreción de una propuesta amplia de unidad de las múltiples fuerzas sociales y políticas que hemos mantenido levantada la bandera de la esperanza por la paz.

La demanda por la solución política del conflicto que se vive a nivel nacional y por la convocatoria a una asamblea nacional constituyente como punto de partida del proceso de construcción de paz se expresa en todos los rincones del país como una demostración de la inmensa capacidad de supervivencia sostenida por todo el pueblo colombiano, y que hemos defendido con las manos llenas de alternativas y posibilidades; por la vida digna, por el derecho a ser, por una democracia plena y real, por la justicia social.

El V Congreso de la Unión Patriótica es un campanazo que activa la certeza de lo que ha ocurrido en Colombia con el sueño labrado de la esperanza por la paz. Sí han existido, como la UP y como tantas otras iniciativas, las voluntades y las fuerzas necesarias para concretar las transformaciones que requiere nuestro país. Y han existido también políticas y prácticas de exterminio contra esas posibilidades, y han querido ser negadas y tergiversadas en la historia, para que dejen de sonar como el llamado que representan todas.

Hoy no hay manera de silenciar ese llamado. Resuena a partir de los diálogos de La Habana, y en cada una de las luchas sociales que se vienen abriendo camino. Hoy, la amplia unidad ha dejado de ser un asunto de conveniencias, para convertirse en un imperativo histórico vinculado con el logro de una transición efectiva a la paz y la democracia.

Así, los diferentes sectores, fuerzas y organizaciones que suscribimos esta declaración amplia y unitaria, queremos asumir la materialización de este llamado y extenderlo a toda Colombia, afirmando:

El respaldo a las luchas sociales que se vienen librando en el país. Su reconocimiento como expresión legítima y justa del fondo del conflicto social y armado, y la necesidad de su solución por la vía del diálogo con garantías, para el cumplimiento de las demandas sociales como contenido mismo de la paz.

La necesidad de la verdad, la justicia y la reparación integral frente al genocidio que han sufrido la Unión Patriótica y las demás fuerzas alternativas sometidas a prácticas genocidas y represivas, como base de consolidación de un verdadero escenario de garantías democráticas para ejercer la oposición política y para ser gobierno.

El apoyo al proceso de paz y a la agenda de la solución política que se desarrolla en La Habana entre el gobierno nacional y las FARC-EP y la exigencia de cumplimiento de los anuncios de diálogo con el ELN.

La convocatoria a un frente amplio por la paz y la democracia que exprese la unidad popular que ya se vive en las calles y en los campos, que suponga un acto histórico de voluntad sobre las lecciones aprendidas, para comprender y caminar desde la diversidad y el respeto, por la victoria.

Abrazando la esperanza por la paz, a los 16 días del mes de noviembre de 2013,

Suscriben:

Unión Patriótica
Vamos Por los Derechos
Movimiento político y social Marcha Patriótica
País Común
Partido Comunista Colombiano
Poder Ciudadano
Movimiento por la Constituyente Popular
Revolución de la Esperanza
Presentes por el Socialismo
Polo al Sur
Hijos e Hijas por la Identidad, la Justicia contra el Olvido y el Silencio
Democracia, Paz y Dignidad
Libres por Colombia