El pasado 19 de mayo de 2014, la lideresa de la Asociación Campesina del Catatumbo, vocera de la Mesa de Interlocución y Acuerdo del Catatumbo, Elizabeth Pabón Guerrero, fue objeto de seguimiento y señalamientos por parte de desconocidos.

En el Centro comercial San Andresito, ubicado en el centro de la ciudad de Cúcuta, dos desconocidos siguieron a la lideresa durante algunos minutos mientras realizaba compras en ese establecimiento. Elizabeth Pabón solo alcanzó a detectar la presencia de los dos desconocidos cuando estaba recibiendo los vueltos en uno de los establecimientos comerciales.

Uno de los desconocidos de piel blanca con camisa de rayas verdes y blancas y cachucha beige se aproximó a 2 metros mientras decía “no es esa”. Un segundo hombre, de estatura baja con camisa azul y gorra negra afirmaba que si era ella la persona a la que al parecer buscaban. “Si es”.
Elizabeth Pabón, entonces, se percató de que los hombres se referían a ella y salió del centro comercial rápidamente. Su esposo, testigo también de la persecución y señalamiento, salió por otra puerta en un intento de confundir a los desconocidos.

Al reencontrarse, ya en el exterior del establecimiento, pudieron escuchar a los dos hombres hablando por teléfono diciendo, el que estuvo más cerca, que no era la persona a la que buscaban, mientras que el otro repetía que sí era.

Elizabeth y su esposo rápidamente abandonaron el lugar subiendo a un taxi de regreso a su casa.

Este hecho no es aislado ya que la familia de Elizabeth Pabón también fue víctima en días anteriores de seguimientos por parte de un desconocido que se movilizaban en una moto. Ese desconocido, al que las hijas de Elizabeth Pabón reconocieron en diferentes lugares, se mantenía en las inmediaciones de los lugares que las familiares frecuentan. En la última ocasión, sabiéndose descubierto, se aproximó y le arrancó una pequeña cadena de oro del cuello a una de ellas.

Elizabeth Pabón ya ha sido víctima de numerosos seguimientos y hostigamientos por parte de la fuerza pública y de algunos desconocidos. El último incidente grave sucedió el pasado 3 de mayo en un retén militar y policial, donde los uniformados la obligaron a bajarse del bus y someterse a una requisa ilegal, mientras la despojaron del acompañamiento internacional que la acompañaba con actos arbitrarios, extralimitándose en sus funciones e incurriendo en numerosas faltas disciplinarias y actos contrarios a la legalidad.

La Asociación Campesina del Catatumbo, se encuentra profundamente preocupada por la seguridad de nuestra líder. Queremos mostrar nuestro más profundo rechazo contra el accionar de la Fuerza Pública que ha puesto en peligro por acción u omisión a nuestra compañera y mostramos también nuestro rechazo más absoluto al accionar de desconocidos que han venido hostigando a Elizabeth Pabón y a otros miembros de nuestra organización, de manera continuada.

Exigimos al gobierno nacional y a las organizaciones responsables de la seguridad en el departamento que cumplan con su labor y garanticen la seguridad e integridad de nuestros miembros y se investigue de inmediato quienes están detrás de los últimos episodios que se vienen presentando. Ninguna de esas investigaciones está arrojando ningún resultado hechos que nos preocupa profundamente.

Gobierno nacional, Policía Nacional y Ejército Nacional son los directos responsables de cualquier situación que pueda acontecer a nuestra compañera y que ponga en compromiso su seguridad como garantes de la seguridad en todo el territorio nacional.

De la misma manera, exigimos a la Unidad Nacional de Protección que deje de inhibirse y otorgar medidas abiertamente insuficientes a una persona con un perfil y un riesgo altísimos y proceda a atender de manera seria y eficaz este caso, mientras la Policía y el Ejército sean capaces de controlar la situación de orden público en nuestro departamento.