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Por nuestros jóvenes toda una vida de lucha y reconciliación
Juventud Rebelde Magdalena Medio / Jueves 19 de mayo de 2016
 

Desde la Juventud Rebelde Magdalena Medio enviamos un mensaje de optimismo, esperanza y reconciliación al pueblo colombiano y celebramos que se esté sentando, en el marco de los diálogos de La Habana, un precedente en el que se pone de manifiesto que los jóvenes en Colombia hemos sido presos de una guerra de la cual no somos causantes.

A propósito del acuerdo entre las FARC-EP y el gobierno nacional, sobre la salida de menores de 15 años de los campamentos guerrilleros, saludamos con gran complacencia un gesto más de las FARC-EP para el desescalamiento del conflicto y su llamamiento a seguir avanzando y rodeando los actuales diálogos para una pronta terminación de esta guerra fratricida, y les hacemos saber:

A las FARC-EP, al gobierno nacional, los entes de control, la iglesia, gremios empresariales, Fuerzas militares, intelectuales y a toda la opinión pública que, como proceso organizativo juvenil que somos, dentro de nuestros objetivos fundamentales están los de rodear y respaldar el proceso de diálogos que se desarrolla en Cuba, el de impulsar la construcción de una paz estable y duradera, y el de hacer pedagogía de paz en las barriadas, campos, colegios, universidades, etc., para hacer de todos los jóvenes a los que les llegamos con nuestro mensaje de la paz con justicia social verdaderos forjadores de paz.

Las y los jóvenes que nacimos en medio de la guerra no hemos respirando ni un segundo el aroma de la paz, somos los huérfanos de la guerra, somos, principalmente, los que hemos abonado las tierras colombianas con nuestra sangre derramada por causa de la guerra. Hay que decirlo, las y los jóvenes hemos sido obligados a ir a ella. Por una parte, vamos a la guerra obligados por la miseria, la explotación, exclusión y la misma violencia en todas sus dimensiones ensartadas sobre nuestras espaldas desde que estamos en el vientre de nuestras madres, reclamando justicia; pero por otra parte, también se nos obliga ir a la guerra por voluntad de ley. ¿Cuál ley? La ley 48 de 1993.

Las y los jóvenes constituimos aproximadamente el 25% de la población colombiana, de los cuales tan sólo uno de cada 3 accede a la educación superior, sumamos el 36% del total de la población desplazada, la tasa de desempleo para nuestro sector alcanza el 18,4 % superando el promedio nacional de toda la población y, finalmente, 1.400 jóvenes muertos en ejecuciones extrajudiciales cometidas por miembros de la fuerza pública. Es un panorama bastante oscuro, sin embargo, aún seguimos creyendo en la paz, la reconciliación y en una Colombia nueva.

Ante esto y lo anunciado en comunicado conjunto entre las partes de las dos delegaciones de la mesa de La Habana sobre los menores en la guerra, la Juventud Rebelde Magdalena Medio abre sus espacios de arte, cultura, formación, organización y participación juvenil para que todos aquellos jóvenes que salgan, no solo de los campamentos guerrilleros, sino también, de los cuarteles militares y de los escenarios de guerra en todas sus dimensiones, hagan parte de nuestro proceso juvenil que se la juega por la paz, la justicia social y los derechos juveniles. Estamos dispuestas y dispuestos a seguir avanzando para ser la generación de la paz.

La sociedad en su conjunto tiene que ser responsable por la suerte de sus jóvenes y nosotros los jóvenes tenemos que asumir la responsabilidad de ser la generación de la paz. ¡Vamos todas y todos por ese sueño inconcluso!