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El medio ambiente es un activo intangible de patrimonio de toda la humanidad
Por qué no se debe autorizar el proyecto minero en La Colosa
Yuri Alexey Navarro Puentes / Miércoles 4 de marzo de 2009
 

Como ciudadano colombiano, como profesional en el área de la geología, habitante del municipio de El Espinal (Tolima), área de influencia del proyecto minero La Colosa, me he dirigido ante el Ministerio del Medio Ambiente solicitando que no se autoricen labores de exploración y explotación minera en zonas declaradas y delimitadas como de protección y desarrollo de los recursos naturales renovables o del medio ambiente.

Algunas de las razones para realizar esta solicitud son las siguientes:

Etapa de exploración

Se está pidiendo la sustracción de aproximadamente 515 hectáreas de una zona de reserva forestal con bosques andinos y de páramo, con suelos caracterizados por su alto contenido de materia orgánica, que cumplen una función importante en la regulación hídrica para la cuenca del río Coello.

En este tipo de proyectos, para recuperar un gramo de oro se debe remover una tonelada de tierra, por lo que se infiere que para que el proyecto sea rentable, se tendrán que remover más de 300 millones de toneladas de tierra, utilizando aproximadamente 800 mil toneladas de dinamita, lo cual tiene un impacto en el ecosistema que aún no se sabe de qué manera se va a mitigar.

En el área concesionada existen 161 vertientes o drenajes naturales que aportan agua a las diferentes actividades socioeconómicas que se realizan en el departamento del Tolima, tales como: acueductos de los municipios de Espinal, Coello y dentro de poco tiempo, acueducto alterno de Ibagué, además del uso del recurso hídrico que hace el distrito de riego Usocoello en una extensión de 63 mil hectáreas, donde aproximadamente unos 1.800 agricultores, usuarios del distrito que siembran arroz, sorgo y frutales, entrarán en crisis por la contaminación y escasez del recurso hídrico.

Etapa de explotación

El proceso de explotación o extracción puede durar 20 años, el cuál incidirá en 9.500 hectáreas alrededor de la zona base que se encuentra en la vereda El Diamante, jurisdicción del municipio de Cajamarca.

El oro a explotar se encuentra diseminado en pequeñísimas cantidades en las rocas y su extracción, dado su bajo tenor, se hará a cielo abierto y utilizando cianuro, sustancia tóxica y letal al entrar en contacto con los ojos, la piel o si se inhala, y que además destruye fauna y flora.

Finalmente, me adhiero a los 20 puntos presentados por la Procuradora Delegada para Asuntos Ambientales, Claudia Cristina Serrano Evers en carta dirigida a Bertha Cruz Forero, directora de Ecosistemas del Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, en donde relata las posibles afectaciones a los recursos naturales si se autoriza la sustracción de la zona para realizar labores de exploración y explotación de oro.

La representante del Ministerio Público señala que los informes técnicos concluyen que “los impactos que se generarían con la sustracción del área serían negativos y de gran escala”:

1. Alteración y destrucción irreversible de ambientes nativos en el área de explotación, y afectación de ambientes naturales vecinos por traslado de agentes altamente nocivos a través de procesos de infiltración, escorrentía y roza de vientos.

2. Deforestación de importantes zonas de bosques nativos, bosques secundarios y páramos. Esta deforestación haría desaparecer fragmentos únicos de ambiente con alta biodiversidad adaptados a los ecosistemas presentes en el área y a metabolismos relativamente bajos.

3. Eliminación de vegetación amortiguadora de los efectos de erosión y de sedimentación.

4. Reducción de la superficie, el volumen y la densidad ecológica original de los bosques. Cuanto más pequeños sean los ambientes nativos, mayor su pérdida de biodiversidad.

5. Pérdida de cobertura vegetal, lo cual origina que los sistemas de drenaje de agua superficial y subterránea se modifiquen en un alto grado, provocando con esto el aumento o la disminución de disponibilidad del recurso hídrico para las comunidades presentes dentro del área de influencia directa del proyecto.

6. Pérdida de la biodiversidad alfa, gamma y beta, principalmente avifauna, anfibios y macroinvertebrados.

7. Contaminación de los cuerpos hídricos presentes en la zona de influencia directa e indirecta del proyecto, con sedimentos, metales pesados, residuos sólidos y patógenos.

8. Cambios en la estructura hidráulica del suelo.

9. Compactación del suelo.

10. Alteración de la temperatura.

11. Alteración de la textura y la estructura.

12. Reducción de capacidad de intercepción e infiltración del suelo.

13. Graves e irreversibles alteraciones geomorfológicas en tiempo ecológico entre uno y cien años, sólo recuperables en centurias y milenios.

14. Distorsión de cuencas hídricas superficiales y subterráneas.

15. Contaminación del aire por emisiones de fuentes móviles y fijas de dióxido de carbono, óxido de nitrógeno, óxido de azufre y material particulado.

16. Contaminación rutinaria y accidental del agua superficial y subterránea, del suelo y de la biota con residuos peligrosos. Habría contaminación por drenajes ácidos que al solubilizar metales pesados aumentarían su propia carga contaminante (cianuro).

17. Podrían presentarse accidentes durante el transporte de sustancias peligrosas (cianuro).

18. Accidentes por derrames en el área de explotación.

19. Destrucción irreversible de los mosaicos de paisaje, como también del fenosistema y del criptosistema y de la percepción ambiental del sitio afectado.

20. Generación de depósitos de residuos peligrosos cuyos contenidos se liberan durante plazos variables de tiempo pese al uso de geomembranas y de otros sistemas de contención, incluso décadas después de terminadas las operaciones.

Reflexionemos: Es una lástima que el Gobierno nos obligue a jugar chance y lotería para que los colombianos tengamos salud, que también nos obligue a tomar licor, a emborracharnos para que nuestros hijos tengan educación y ahora… ¿será que tenemos que entregar un pulmón del planeta como lo es la zona de reserva forestal especial para que el pueblo de Cajamarca obtenga unas pírricas regalías? ¿A cambio de qué contaminemos más nuestro planeta? ¡Recordemos que el medio ambiente es un activo intangible de patrimonio de toda la humanidad!

¡La historia nos dará la razón!