Asociación Campesina del Valle del Río Cimitarra
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La ACVC recibió el Premio Nacional de Paz 2010
Vanguardia / Viernes 26 de noviembre de 2010
 

El Magdalena Medio santandereano fue gran protagonista antenoche en Bogotá en la entrega del Premio Nacional de Paz 2010. La Asociación Campesina del Valle del Río Cimitarra, ACVC, recibió el máximo galardón a la lucha por la paz como reconocimiento a sus 14 años de trabajo en la defensa de los derechos humanos, la salud, la educación, el medio ambiente en la región.

Además, por su incansable labor en defensa de la vida y la reconciliación, el jurado otorgó el premio honorífico (fuera de concurso) a Monseñor Nel Beltrán, Obispo de Sincelejo y natural del municipio de San Andrés (Santander) y Monseñor Leonardo Gómez Serna, Obispo de Magangué y quien por 16 años estuvo al frente de la Diócesis de San Gil-Socorro.

César Jerez, dirigente de Asociación Campesina del Valle del Río Cimitarra señaló que “estamos muy contentos porque es un reconocimiento no sólo a la ACVC, sino a la labor campesina del país por la defensa de los derechos humanos y el desarrollo rural”.

A su turno, Miguel Cifuentes, integrante de la ACVC, aseguró a Vanguardia Liberal que reciben este premio como reconocimiento a 14 años de luchas por la paz en el Magdalena Medio. “Es un premio para la región de Magdalena Medio. Es un premio para los campesinos del país, que no tenemos mayor reconocimiento ante el Estado”.

El Premio Nacional de Paz nació en 1999 y se ha instituido como un instrumento para promover la paz, la humanización, la solidaridad y el entendimiento civilizado entre los colombianos. Para esta versión recibió 114 postulaciones

Así se dio a conocer ayer en una ceremonia en la que también fue galardonada la Fundación Social Macoripaz, de Riosucio en Chocó, al integrar a un grupo de personas que atienden y promueven alternativas de acompañamiento a mujeres en condición de desplazamiento y víctimas de la violencia.

Cabe advertir que la ceremonia, que premió en su décima segunda convocatoria, a las personas o entidades que contribuyan en el desarrollo de procesos de paz, contó con la participación de 30 campesinos de la región, quienes tuvieron la oportunidad de entregar un discurso en el que se dieron a conocer sus propuestas de desarrollo para el país.

Premio Honorífico

Por su incansable labor en defensa de la vida y la reconciliación, el jurado del Premio Nacional de Paz otorgó el premio honorífico (fuera de concurso) a varios presbíteros del país entre los que se encuentra el obispo de Sincelejo, Monseñor Nel Beltrán Santamaría. El prelado nació en San Andrés, Santander, el 24 de diciembre de 1940.

Fue ordenado sacerdote el 29 de junio de 1964 en Barrancabermeja después de estudiar filosofía en el Seminario Mayor de Pamplona y Teología en la Pontificia Universidad Javeriana en Bogotá, donde consiguió la Licenciatura en Teología. Prosiguió sus estudios en Roma donde obtuvo la Licenciatura en Sociología en la Pontificia Universidad de Santo Tomás y el Doctorado en Teología Moral en el Pontificio Ateneo de San Alfonso.

En su ministerio sacerdotal ocupó, entre otros cargos, los de Vicario Parroquial(San Vicente de Chucurí), de Párroco(Las Granjas y la Catedral en Barrancabermeja), de Asistente del Movimiento “Cursillos de Cristiandad”, Vicario de Pastoral y Vicario General de la Diócesis de Barrancabermeja, ocupó el cargo de Director del Secretariado Nacional de Pastoral Social de la Conferencia Episcopal de Colombia hasta abril de 1992.

Actualmente es uno de los miembros de la sociedad civil en la Comisión Nacional de Reparación.

Sobre la asociación

La Asociación Campesina del Calle de Cimitarra, ACVC, fue fundada hace 14 años con una movilización campesina y actualmente es integrada por 120 Juntas de Acción Comunal, en municipios como Yondó y Remedios, Antioquia, y San Pablo y Cantagallo, en el sur de Bolívar. Proyectos productivos han sido implementados en más de 500 mil hectáreas y se han conformado diversos comités de derechos humanos.