Cerca de 200 personas de la guardia indígena de López Adentro se enfrentaron a miembros del Esmad frente a las instalaciones de la URI de la Fiscalía de Santander de Quilichao, Cauca, en el momento en que pretendían trasladar al Jefe de la Guardia Indígena del Norte del Cauca, Manuel Antonio Bautista Pequi, quien fue capturado y sindicado de nexos con las Farc.

La captura en la madrugada de este sábado en Santander de Quilichao, del Jefe de la Guardia Indígena del Norte del Cauca, Manuel Antonio Bautista Pequi, hizo que
numerosas organizaciones de cabildos y resguardos, bloquearan las calles principales de esta localidad y causaran destrozos en la sede de la URI de la Fiscalía.

Para dispersar a los manifestantes fue necesaria la presencia de unidades del Escuadrón Antidisturbios, Esmad, quienes hicieron uso de gases lacrimógenos y balas de goma.

Bautista Pequi, fue capturado por personal de la Sijín de la Policía del Cauca, cuando se dirigía a visitar a un hermano en un hospital de la ciudad de Cali, y se le sindica de pertenecer al Sexto Frente de las Farc, y de actos de rebelión y terrorismo.

El coronel Lemos, comandante encargado de la institución en el Cauca, reportó, que el detenido es solicitado por el Juzgado 10 Especializado de la ciudad de Bogotá, y la orden de captura fue expedida por el Juzgado 20 municipal de la misma ciudad.

Hacia el mediodía de este sábado tendrá lugar en una Fiscalía de Popayán, la diligencia de judicialización de Bautista Pequi, quien pertenece al resguardo de Lòpez Adentro, sobre la cordillera Central.

Por su parte, en un comunicado de prensa la ACIN sostuvo que con la captura se violan los acuerdos pactados con las comunidades indígenas:

“Rompe con los acuerdos que el Gobierno pactó con los pueblos indígenas del Cauca en las recientes comisiones de diálogo de suspender la orden de captura contra 139 miembros de los pueblos indígenas incluidos en la lista de la Fiscalía por estar involucrados en acciones de exigibilidad de los derechos de la comunidad y que como señalan autoridades indígenas, consejeros de la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca, y varios testimonios de la comunidad, no es más que una patraña institucional para romper el proceso de resistencia del movimiento indígena caucano”, asegura un aparte del escrito de lA ACIN.

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