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Comunicado de Anzorc leído en el seminario "Autonomías, soberanías, desarrollo rural y Zonas de Reserva Campesina". Bogotá. 26 de abril
La autonomía y la soberanía no son los problemas de las Zonas de Reserva Campesina (ZRC)
Llegar a acuerdos de paz y cumplir la ley 160, el camino para solucionar el problema de la tierra y el logro de la paz estable y duradera en Colombia
 

Los 50 procesos que construyen Zonas de Reserva Campesina (ZRC), organizados en la Asociación Nacional de Zonas de Reserva Campesina – Anzorc, reunidos en su décima asamblea general realizada el pasado 23 de abril manifestamos a la sociedad colombiana y a las partes del proceso de paz lo siguiente:

1. Durante el Tercer encuentro nacional de ZRC de San Vicente y la marcha por la paz del 9 de abril de Bogotá cerca de 40 mil campesinos de las ZRC del país que participaron y marcharon, dejaron clara su exigencia a las partes del proceso de paz de llegar a acuerdos para solucionar el problema de la tierra, iniciar las transformaciones sociales, económicas y políticas que el país requiere, terminar el conflicto armado e iniciar el camino hacia una paz estable y duradera con justicia social.

2. Durante esta semana de reactivación de las conversaciones de paz, la Anzorc ha realizado talleres de construcción de ZRC en el Huila y el Quindío, hemos instalado una mesa de Universidades y ZRC, tambien una mesa de cooperación internacional y ZRC el día de ayer, haremos hoy un nuevo intento por instalar e iniciar una mesa de articulación e interlocución institucional sobre ZRC e instalaremos una mesa de Parques Naturales y ZRC, que empiece a solucionar los conflictos entre estas dos figuras territoriales.

3. Todos nuestros esfuerzos por normalizar la relación entre las ZRC y la acción gubernamental se ven truncados por el veto ilegal del Ministerio de Defensa sobre las ZRC y por la orientación que funcionarios gubernamentales vienen dando para que no se avance en la reactivación efectiva, el impulso y la constitución de nuevas ZRC. Unos aducen razones de “seguridad nacional”, los otros dicen que es necesario esperar a los acuerdos de La Habana en materia de Zonas de Reserva Campesina.

4. La Anzorc le recuerda al gobierno de Santos que debe observar las reglas de juego del Estado de derecho, que por lo tanto debe cumplir la ley 160, su articulado y la reglamentación existente en materia de ZRC, que debe cumplir los acuerdos firmados en materia de ZRC con las organizaciones campesinas. ¿De qué nos sirve esperar a los acuerdos de La Habana si lo que tenemos hasta ahora es un largo historial de incumplimientos? Señor Santos, la política del “conejo” de los últimos gobiernos en materia de ZRC no puede extenderse hasta los acuerdos de La Habana.

5. Las ZRC son una iniciativa agraria de paz y representan una oportunidad excepcional para solucionar el problema de la tierra, iniciar un proceso de reforma agraria y reordenar territorialmente al país, reconociendo los derechos del campesinado en su integralidad, pero esa posibilidad no debe quedar expresamente sujeta a la eventualiadad de los acuerdos, el gobierno debe cumplir la ley, su cumplimiento representaría una voluntad y un claro indicador de paz.

6. La estigmatización y los señalamientos que ha permitido el gobierno contra las ZRC en los últimos meses ya se cobraron la vida del dirigente campesino Gustavo Piso en la ZRC de Totoró, Cauca. A diario vivimos bajo la amenaza de muerte y la sindicación de los “señores de la tierra” en los medios de comunicación. La muerte o la cárcel pareciera ser el futuro de los hombres y mujeres que construyen ZRC en Colombia.

7. No existen garantías para adelantar este proceso. A los señalamientos se ha sumado hasta el jefe negociador de paz del gobierno, Humberto de la Calle, al manifestar que la posición del Gobierno es un no rotundo a las Zonas de Reserva Campesina, “los campesinos no son una etnia ni ciudadanos especiales por lo que no podemos crear guetos de la sociedad. En esto no vamos a ceder” ha dicho de la Calle. Republiquetas independientes, cartuchos rurales, incubadoras de miseria y ahora guetos de la sociedad son los calificativos denigrantes que reflejan los que piensan realmente latifundistas, terratenientes, mafiosos y oligarcas sobre las ZRC. Señor De la Calle, usted y los ministros de agricultura y de defensa deben leer la ley 160 y dejar de utilizar a las ZRC para oponerse y atacar el proceso de paz.

8. Le solicitamos a las partes del proceso de paz pronunciarse sobre estos ataques impunes contra las ZRC. Tambien le solicitamos a las partes pronunciarse, como respaldo político, sobre nuestra propuesta de construir un sistema y un programa nacional de ZRC. Necesitamos saber como van a ser tenidas en cuenta nuestras propuestas. Reiteramos nuestra solicitud al gobierno y a las FARC para que permitan nuestra participación directa en la mesa. Esa participación es fundamental ante la eventualidad de acuerdos en materia de ZRC. Nuestro aporte es de paz, permitannos llegar con nuestras propuestas, cualificar y legitimar estos acuerdos.

9. Los enemigos de las ZRC y de la paz han utilizado los conceptos de autonomía y soberanía para atacar a las ZRC. Anzorc considera que la autonomía de hecho de las ZRC se da precisamente por la ausencia histórica del estado, de sus políticas públicas y de la inversión social en nuestros territorios. La guerra en los campos no representa la soberanía del estado. La soberanía la pierde a diario el estado colombiano no solo en el mar Caribe, también en los millones de hectáreas y las toneladas de recursos naturales que entrega anualmente a las empresas multinacionales casi sin contraprestación alguna para las comunidades rurales, el estado colombiano pierde soberanía a diario con el uso de la violencia contra sus irreconocidos e invisibilizados ciudadanos en el campo.

10. Para aclararle a la sociedad colombiana cuál es la autonomía que tienen las ZRC y cuál es la que proponen, hemos convocado el día de mañana al seminario "Autonomías, soberanías, desarrollo rural y ZRC". Las ZRC y los territorios campesinos requieren, en todo caso, de una autonomía que debe ser formalizada, constitucionalizada, reglamentada, esta autonomía puede ser restringida o plena, eso depende de cómo se desarolle la discusión, el debate y el nivel de los acuerdos políticos y sociales frente a la solución definitiva del problema de la tierra y la cuestión agraria en Colombia. Las ZRC no están para destruir el ordenamiento territorial y político - administrativo del Estado. Todo lo contrario, estamos en las ZRC para aportar a un nuevo ordenamiento territorial y a la integración nacional de un estado soberano, autónomo, fuerte, en terminos de equidad, igualdad y acceso a derechos para todos y todas.

Tierra, teritorio, derechos humanos, desarrollo rural, justicia social y paz para el campesinado colombiano!!!

Somos:

La Asociación Nacional de Zonas de Reserva Campesina - ANZORC

Informes:

310 3435667

zonasdereservacampesina@gmail.com