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En riesgo presos políticos en cárcel de La Dorada (Caldas)
 

La Fundación Comité de Solidaridad con los Presos Políticos, se permite denunciar ante la comunidad nacional e internacional los siguientes

Hechos:

El día de hoy, 5 de agosto de 2008, nuestra Fundación recibió varias llamada telefónicas de los detenidos políticos del Establecimiento Penitenciario y Carcelario de Alta y Mediana Seguridad Doña Juana en La Dorada (Caldas), en las que nos informaron que continúan en grave riesgo sus vidas, pues permanentemente son hostigados y amenazados por los reclusos que se encontraban en los patios a donde fueron trasladados.

Nos informaron que "en el patio 2, varios detenidos sociales han manifestado que no soportan convivir en sus celdas con detenidos políticos". En particular los detenidos políticos Jamel Galvis y Giovanni Hernández, recluidos en este pabellón, quienes han solicitado a la Junta del Patio el cambio de celda, pero no han obtenido respuesta al respecto. Dicen igualmente, que en general, los detenidos sociales "no pierden oportunidad para hostigarlos y decir que no quieren convivir con ellos en el patio".

Agregan que en los patios a donde han sido trasladados (2, 4, 5 y 6), "los reclusos elaboran cuchillos con los ángulos de las puertas que arrancan diariamente de manera descarada y desafiante y los afilan y la guardia no hace nada, aunque se dan cuenta de eso". Dicen: "Tememos lo que se llama una avalancha, que es que en cualquier momento se vayan en contra nuestra con armas blancas que ellos tienen y hacen aquí. Nosotros no tenemos condiciones para defendernos, así que seguramente resultaremos heridos o tendremos que poner otro muerto".

Informan igualmente que "en los patios 4 y 5 está la situación muy mal, ya nos han mostrado cuchillo. Los detenidos políticos intentamos reunirnos con los detenidos sociales para hacer acuerdo de convivencia y en esa reunión nos mostraron "chuzos" y nos dijeron que ese no era el patio 3, que el control lo tenían ellos, que no se dejarían quitar el poder".

Recuerdan que el primer día en que fueron trasladados (2, 4, 5 y 6) los reclusos que allí se encontraban afilaron sus cuchillos frente a los detenidos políticos y les dijeron que el control del patio lo tenían ellos y que "si quieren remiendos, aquí les hacemos el roto y busquen quién se los cosa", esto en actitud de clara amenaza.

Manifestaron que en la Torre 5, Francisco Javier Rivera, debido a una persecución muy grave, debió pedir su traslado al patio de sindicados, lo cual se concedió por su condición de procesado.

Igualmente, que en el patio 5 el detenido político Niyer Piragua fue hostigado y atacado por un detenido social, produciéndose un altercado.

Los detenidos políticos de la Torre 2 manifiestan: "Ustedes no se imaginan el problema que es recibir la comida, nos toca pasar de últimas para recibirla, porque primero pasan ellos, los de las bandas que tienen los otros reclusos, que no le hacen fila a nadie, pasan delante de todo el mundo. Muchas veces hemos llegado y ya no hay comida".

Manifiestan los detenidos políticos que los operativos de requisa se están centrando en las celdas donde están ellos y se han producido daños en nuestros objetos de aseo personal, como los jabones, que son partidos. "Esto atenta contra nuestra dignidad, pueden ser cosas sencillas, pero son muchas al tiempo para minar nuestra moral".

Dicen los detenidos políticos que han hablado con el cónsul de Derechos Humanos del penal, Gómez largo, quien ha manifestado su intención de intervenir y colaborar, pero no ha habido respuesta y mucho menos, medidas que pongan fin al estado de temor, zozobra de posibles ataques y a los hostigamientos, agresiones permanentes y a las múltiples violaciones a sus derechos fundamentales.

Igualmente manifiestan que algunos detenidos políticos que quedaron en el patio 3 quieren trasladarse de patio, ante la presión que les significa convivir con reinsertados o personas acogidas a la Ley de “Justicia y Paz”, pero que les niegan el cambio de pabellón.

Nos reiteran que no les están dejando entrar prensa alternativa. El día de hoy no se dejó entrar la misma. "Se trata de los periódicos Voz, Periferia, Desde Abajo y otros periódicos que elaboran los presos políticos de otros establecimientos, que el Comité nos envía. Nosotros queremos leerlos porque creemos que no tergiversan la verdad, pero no nos permiten hacerlo, porque supuestamente son materiales subversivos".

Los presos políticos advierten: "tememos porque cualquier cosa puede ocurrir y cuando se habla con oficiales o suboficiales de la guardia, ellos manifiestan que si algo nos pasa, el estado paga".

La misma información que hoy se nos trasmite a través de esta llamada telefónica, nos fue comunicada en el marco de nuestra última visita al establecimiento, lo que indica que el riesgo contra su vida e integridad personal y psicológica es inminente, debido a que han recibido ataques sistemáticos desde que fueron sacados del Pabellón 3 y distribuidos en todos los demás.

Nuestra Fundación deja constancia que del peligro en que se ha puesto a los detenidos políticos del Establecimiento Penitenciario y Carcelario de Alta y Mediana Seguridad Doña Juana en La Dorada (Caldas). Han sido informadas las autoridades carcelarias y los órganos de control, desde el momento en que se presentaron los traslados internos, sin que hasta el momento se hayan adoptado las medidas necesarias para frenar la vulneración de los derechos humanos que se vienen presentando y evitar situaciones de mayor gravedad.

Hacemos un llamado urgente a las personas y organizaciones defensoras de los derechos humanos, a oponerse a las medidas violatorias de los derechos fundamentales de los detenidos políticos del Establecimiento Penitenciario y Carcelario de Alta y Mediana Seguridad Doña Juana en La Dorada (Caldas).

Llamamos a las autoridades nacionales a intervenir de manera eficaz para que cesen los hostigamientos y amenazas contra los detenidos políticos y se garantice su seguridad.

El Gobierno Nacional ha tomado la determinación de ubicar a los detenidos que se han acogido a los preceptos de la Ley de “Justicia y Paz” en pabellones especiales donde conviven entre sí, bajo el argumento de garantizar su seguridad. Bajo esta misma perspectiva, nuestra Fundación reitera la solicitud que durante muchos años ha venido elevando a las autoridades colombianas, en el sentido que los detenidos políticos deben ser clasificados y separados en Torres o pabellones, por su condición, evitando así poner en riesgo su vida e integridad personal. Debemos anotar que en casos similares la Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha recomendado al estado colombiano tal separación.

Instamos nuevamente a las autoridades carcelarias a adoptar las medidas necesarias para proteger y garantizar a los detenidos políticos del Establecimiento Penitenciario y Carcelario de Alta y Mediana Seguridad Doña Juana en La Dorada (Caldas).