Los lamentables hechos ocurridos en los últimos días en la localidad 20 de la ciudad de Bogotá D.C, Sumapaz, son la muestra de la falta de voluntad política que demuestra el gobierno nacional al asumir y afrontar los diálogos de paz que se desarrollan en la Habana, Cuba.

La captura de 14 líderes agrarios de la zona rural de la ciudad de Bogotá es muestra fehaciente de ello. Las acusaciones por las cuales se detuvieron a los dirigentes campesinos tienen que ver con lo que se conoce como montajes judiciales, o falsos positivos judiciales, que pretenden demostrar capturas y positivos por parte de la fuerza pública, sin contar con pruebas contundentes que demuestren los delitos cometidos por los capturados.
Ello no es más que la muestra de incapacidad del gobierno nacional por entender y comprender que en Colombia existe un movimiento campesino, que propende por un país en paz y con justicia social que reclama y exige condiciones de vida digna para el campo y que lo demuestra, en este caso, a través de la organización campesina SINTRAPAZ.

Es así que en un acto extraordinario de solidaridad con los 14 dirigentes capturados y sus familias, se realizó en el corregimiento de San Juan del Sumapaz, el comité local de paz, en donde ante las autoridades distritales como la subsecretaria para asuntos locales y la alcaldía local de Sumapaz, los campesinos sentaron un precedente y una denuncia en defensa de sus líderes capturados, entre los que se encuentra el edil de la ciudad de Bogotá, Alexander Guzman.

Demostrando que se hace inminente el retito de las unidades militares que se encuentran en el páramo, las cuales reiterativamente invaden fincas y casas campesinas para instalar sus campamentos, violando el DIH y el derecho a la propiedad, demandando junto a ello también la inmediata liberación de los dirigentes capturados, de esta región que ha sido tan golpeada por el conflicto político social y armado.

Exigiendo además el reconocimiento de la histórica lucha de los campesinos de esta región por la consolidación de la figura territorial de la Zona de Reserva Campesina, declarando una vez más que los campesinos de la región del Sumapaz, son sujetos de paz que buscan la convivencia y la justicia en sus territorios a través de la organización democrática y pacífica.