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Acto discriminatorio contra comunidad LGTBI en Asamblea departamental de Santander
Agencia Prensa Rural / Miércoles 27 de julio de 2016
 

Otro caso de intolerancia contra la comunidad LGBTI tuvo lugar en la Asamblea Departamental de Santander. El acto se presentó en pleno debate público sobre la implementación de la Ley 1620 de “Convivencia escolar y formación para el ejercicio de los derechos humanos, la educación para la sexualidad y la prevención y mitigación de la violencia escolar”.

Foto: Marcha Patriótica

La diputada Ángela Hernández, del partido de la U, hizo comentarios discriminatorios y la emprendió contra el Ministerio de Educación Nacional. "Quieren colonizar las instituciones académicas implementando normas LGBTI por encima de los derechos de los niños y las niñas", sentenció la diputada. A la par argumentó que estas imposiciones se están haciendo desde que Gina Parody es Ministra de Educación.

En el recinto, la diputada mencionó que en algunos países donde se han dado libertades a dicha comunidad "llegaron a la perversión máxima, en la que incluso se permite el sexo con animales", tergiversando el debate y dándole un tinte moral. Seguidamente en la discusión, varios pastores cristianos pasaron a dar su concepto, partiendo de sus creencias religiosas. Cabe resaltar que según la Corte Constitucional, en sentencia C-350/94, Colombia es un Estado laico; por lo tanto, aunque las argumentaciones de los diversos credos son muy importantes ya que representan a varios sectores de la sociedad, éstos no son obligantes o vinculantes ante la Ley.

Mientras se incentiva a trabajar el lenguaje para la paz y la reconciliación, Hernández como servidora pública utiliza apelativos que no ayudan a la convivencia. Comentarios como “si en Colombia hubiera tantos padres interesados en que sus hijos crecieran con estas prácticas (…) que creen colegios LGTBI, a ver cuántos niños van a ser inscritos” son excluyentes y ofensivos. Líderes de la comunidad afectada expresaron su inconformidad puesto que la Ley es incluyente y busca que en los colegios se detenga la discriminación y matoneo frente a aquellos que están en la libertad de construir su género u orientación sexual.

Después del hecho de discriminación ocurrido con Sergio Urrego en un colegio de Bogotá, la Corte Constitucional emitió la Sentencia T- 478 de 2015 donde se ordenó ajustar los manuales de convivencia para no discriminar a la población LGBTI. Sin embargo en la Asamblea de Santander la diputada Hernández interpretó a su acomodo el articulado.

La secretaria de educación de Bucaramanga, Ana de Dios Tarazona, expresó que se deben construir manuales de convivencia incluyentes donde se respete la diferencia ya sea de credo, posturas políticas o identidad sexual.

Las autoridades educativas han manifestado que el manual de convivencia no se impone sino que se crea con la comunidad educativa, en cuanto a la alusión hecha por la diputada sobre crear baños para que los niños o niñas que tienen un género no definido usen el que mejor les parezca; la Secretaría de Educación dijo que no es cierta puesto que en ningún artículo de la Ley 1620 lo dice. Al parecer la diputada santandereana se confundió y pensó que el acto de igualdad y de tolerancia realizado por la universidad del Externado de Colombia, en cuanto al uso mixto de los baños en sus instalaciones, era una directriz del Ministerio de Educación.

Lo cierto es que se prendió el debate sobre como los representantes políticos tratan a aquellos que no piensan igual. Cabe resaltar que algunos entes de control que deberían ser garantes derechos, también discriminan a quienes no se acomoden a sus estándares, como es el caso de la Procuraduría que se ha opuesto a las conquistas del sector LGBTI en la sociedad colombiana o del nuevo Fiscal General y su postura sobre la violencia contra las mujeres.