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Carta abierta a Juan Manuel Santos
El preso político colombiano David Ravelo debe ser liberado, ahora mismo
/ Sábado 21 de enero de 2017
 

Recientemente el Comité Norteamericano para la Defensa de David Ravelo y el Comité para la Defensa Sindical Internacional (International Labor Defense) en Boston escribieron una carta abierta al Juan Manuel Santos Calderón, el Presidente de la República de Colombia. La carta exige la libertad del prisionero David Ravelo. El 19 de enero los miembros de ambos grupos entregaron la carta al Yida Ximena Mora Silva, cónsul colombiano en Boston, adjunto con una lista de 271 personas y 38 organizaciones que firmaron en apoyo. La carta sigue:

Estimado presidente Juan Manuel Santos Calderón: Los que firman esta carta creen que el cargo contra el preso David Ravelo se venció hace mucho tiempo debido a las mentiras y procesamiento ilegítimo. Con respecto, nosotros le pedimos que ordene a su gobierno liberar al Señor Ravelo.

Los que firman esta carta creen que el cargo contra el preso David Ravelo se venció hace mucho tiempo debido a las mentiras y procesamiento ilegítimo. Con respecto, nosotros le pedimos que ordene a su gobierno liberar al Señor Ravelo.

David Ravelo fue detenido el 14 septiembre de 2010 en Barrancabermeja, Colombia. Fue acusado de planear el asesinato del funcionario municipal David Núñez Cala en 1991 y ahora está sirviendo una sentencia de 18 años. Actualmente la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos está considerando su caso.

Creemos que Ravelo es simbólico de miles de presos políticos en limbo mientras Colombia realiza su Acuerdo de Paz [1]. Combatientes y presos políticos civiles encarcelados pronto podrían ser elegibles para la amnistía [2]. Ravelo necesita ser uno de ellos.

Barrancabermeja, la ciudad natal de Ravelo, produce 60 por ciento de los productos petróleos de Colombia. A finales de los años ochenta, la Unión Patriótica (UP) entró en la política local. Pronto David Ravelo se convirtió en miembro del consejo de la ciudad de Barrancabermeja y delegado a la Asamblea de Santander, ambos de la UP. Sin embargo, en esos momentos, los asesinatos dirigían sus esfuerzos contra los activistas de la UP en Barrancabermeja y también en el país.

Ravelo fue acusado de rebelión en 1993 y fue a prisión por 27 meses. A los finales de los años noventa, los paramilitares dominaban la ciudad y los alrededores [3]. Masacraron a 36 habitantes de Barrancabermeja el 16 de marzo de1998 y 17 más el 28 febrero de 1999.

En Barrancabermeja, Ravelo era un organizador sindical, educador para la comunidad, y periodista. Por mucho tiempo fue un miembro del comité central del Partido Comunista de Colombia. La diócesis de Barrancabermeja honró a Ravelo en 2008 por sus treinta años dedicados a la defensa de los derechos humanos. En respuesta a la violencia de los paramilitares, fundó y dirigió a CREDHOS, una organización que luchó por los derechos humanos. Después, muchos de los dirigentes de CREDHOS fueron asesinados o amenazados. [4]

En 2007 Ravelo distribuyó un video en el que se mostró al presidente Uribe socializando con dirigentes paramilitares de Barrancabermeja en 2001. Nosotros sospechamos que el video fue embarazoso para el Presidente Uribe y por lo tanto su gobierno tomó acción contra Ravelo. (El video se puede ver aquí: https://www.youtube.com/watch?v=8oM-SIhcV9o )

Persecución, mentiras, y la venganza

El gobierno de Colombia en 1999 condenó a los dirigentes paramilitares Mario Jaimes Mejía (alias “Panadero”) y Fremio Sánchez Carreño por organizar las dos masacres en Barrancabermeja. Cada uno recibió una sentencia de veinte años. David Ravelo tomó un papel en su caída debido a que los había acusado.

Según Ravelo, el dirigente paramilitar Roberto Pérez Álzate en la cárcel en Itagüí dijo que “dieron la orden a Mario Jaimes Mejía, alias Panadero, para que acusara falsamente a David Ravelo y a Arístides Andrade” [5].

Jaimes confesó que organizó las masacres de 1998 y 1999 para calificar para la Ley de Justicia y Paz de 2005. Según esa ley, los dirigentes paramilitares que dicen la verdad y desmovilizan a sus tropas estarán ocho años en prisión. En 2008 Jaimes confesó al asesinato de Núñez e identificó a Ravelo y el ex congresista Arístides Andrade como cómplices. Pretendió que asistieron a una reunión en Barrancabermeja donde el asesinato fue planeado. Otra vez las acusaciones contra Ravelo facilitaron a su entrada al Programa de Justicia y Paz.

Fremio Sánchez, el colega paramilitar de Jaimes, también confesó a las masacres y su papel en el asesinato de Núñez Cala. También acusó a Ravelo y Arístides Andrade para calificar por el Programa de Justicia y Paz.

Jaimes Mejía era un miembro de las FARC cuando mató a Núñez Cala. Más tarde ingresó a los paramilitares. En apoyo a su alegato que Ravelo se asoció con las FARC en el momento del asesinato de Núñez Cala, mostró una foto tomada en 1985 a los investigadores de Ravelo en una reunión por la paz en un campamiento en la selva. Las autoridades habían usado la foto vieja para mandar a Ravelo a la prisión en 1993. Ravelo fue liberado cuando fue mostrado que el “Ravelo” en la foto era alguien más, un periodista.

En los apretones del estado

La prosecución y el juicio de Ravelo revelaron errores legales terribles. Por ejemplo, el tribunal aceptó la acusación – una mentira – de Jaimes Mejía que Ravelo y Andrade habían participado en el asesinato. El 20 agosto de 2014 el fiscal general de Colombia lo acusó de mentir. Una unidad judicial, especializada en falsos testigos, está investigando [6]. Sin embargo, entre el 26 de mayo de 2015 y el 27 de octubre de 2016 seis sesiones programadas del tribunal no sucedieron.

Además el fiscal en el caso de Ravelo, William Pacheco Granados, es un criminal. Como un teniente de la policía en 1991, hizo la desaparición forzada de un joven [7]. Fue condenado por un tribunal militar y pasó un año en la cárcel. La Ley 270 del año 1996 prohíbe a cualquiera que haya sido despedido de un “oficio público” o condenado de un crimen ingresar “a la rama judicial” [8]. Ahora Pacheco Granadas está acusado de homicidio.

De hecho, la criminalidad del acusador de Ravelo, Mario Jaimes Mejía, parece no tener límites. Jaimes había tomado disposiciones para la periodista Yineth Bedoya que sería secuestrada antes de que le entrevistara en la cárcel en 2000. Ella fue golpeada y violada. Jaimes recibió una sentencia de 28 años.

Además Jaimes Mejía sobornó a los compañeros prisioneros para que dijeran que Ravelo y Arístides Andrade habían asistido a la reunión donde el homicidio fue planeado. Jaimes usó al prisionero Fremio Sánchez para reclutar a testigos falsos, según testigos en el juicio de Ravelo. Los funcionarios de la cárcel facilitaron a las reuniones para permitir las conspiraciones de Jaimes y Sánchez en contra de Ravelo [9] [10].

Además, a ninguno de los 30 testigos en defensa a Ravelo les fue permitido dar testimonio durante el proceso judicial. El fiscal Pacheco acabó su investigación antes del juicio sin aceptar el testimonio relacionado a la inocencia de Ravelo.

Además había cuatro semanas entre el tiempo que Ravelo fue condenado y el anuncio mismo de su condena en 11 de diciembre de 2012. Esta “flagrante violación al debido proceso” retrasó los preparativos para la apelación de Ravelo [11].

Finalmente, la atmósfera alrededor del juicio del Ravelo fue macabro: “integrantes de su familia y los miembros de CREDHOS continuamente sufrían amenazas de muerte y hostigamientos por parte de los grupos paramilitares” [12].

Ravelo en su resumen dice: “[L]os paramilitares tenían ’razones’ para pretender eliminarme, por eso en múltiples ocasiones intentaron asesinarme físicamente, no lo lograron, entonces decidieron asesinarme judicialmente, y para ello implementaron ’el montaje judicial’, utilizando la mentira como su arma favorita; por cuanto está claro que la verdad es la primera víctima de la guerra” [13].

Esta carta fue preparada por W. T. Whitney Jr., y traducida por Mary McMinn.

Los individuos y las organizaciones que firman a la carta abierta en apoyo:

1. Avi Chomsky, Salem, Massachusetts, USA

2. Bruce Gagnon, Bath, Maine, USA

3. Dan Kovalik, Pittsburg, Pennsylvania, USA

4. David Bacon, USA

5. James D. Cockcroft, Montreal, Quebec, Canada

6. Jeffrey St. Clair, Petrolia, California, USA

7. Kathy Kelly, Chicago, Illinois, USA

8. Medea Benjamin, Washington DC, USA

9. Noam Chomsky, Cambridge, Massachusetts, USA

10. Ray Luc Levasseur, Waldo, Maine, USA

11. Frank McGreal, Vancouver, British Colombia, Canada

12. Adrian C.Y. Fu, Vancouver, British Columbia, Canada

13. Alan Bede, Arlington, Massachusetts, USA

14. Bill Hackwell, Oakland, California, USA

Además, 257 más nombres de personas

Organizaciones

1. African Awareness Association, Richmond, Virginia, USA

2. All-African People’s Revolutionary Party (GC)

3. Alliance for Global Justice

4. Arizona Peace Council

5. Brooklyn Greens

6. Campaign to Stop Killer Coke, New York, New York, USA

7. Center for Marxist Education, Cambridge, Massachusetts, USA

8. Chicago ALBA Solidarity

9. Code Pink

10. Colombia Support Network

11. Committee for International Labor Defense (Boston)

12. Communist Party of Australia

13. Communist Party of Canada

14. Communist Party USA

15. Freedom Road Socialist Organization

16. Global Network against Weapons in Space

17. Greater New Haven Peace Council, Connecticut, USA

18. Houston Communist Party, Texas, USA

19. Houston Peace Council, Texas, USA

20. International Committee for Peace, Justice and Dignity, Oakland, CA

21. International Network in Solidarity with Colombia’s Political Prisoners

22. Ken Appelhans Club, CPUSA; Indianapolis; Indiana; USA

23. Let Cuba Live Committee of Maine

24. Maine Green Party Peace Network

25. Maine Green Women’s Caucus

26. Maine Independent Green Party

27. Maine Veterans For Peace, Tom Sturtevant chapter 001

28. Midcoast Peace and Justice Group, Warren, Maine

29. MLToday.com

30. Movement for People’s Democracy

31. National Lawyers Guild, Massachusetts Chapter

32. National Network on Cuba

33. Peninsula Peace & Justice, Blue Hill, Maine, USA

34. The International Committee of the National Lawyers Guild

35. The Party for Socialism and Liberation

36. U. S. Peace Council

37. Voices for Creative Nonviolence

38. Workers World Party