La asamblea de delegados de la Asociación Distrital de Educadores determinó en su reunión del pasado jueves 4 de mayo convocar a paro indefinido distrital del magisterio a partir del 17 de mayo.

El objetivo principal será confrontar las políticas neoliberales de la administración de Enrique Peñalosa, que están generando un caos en la educación pública de Bogotá, perjudicando a estudiantes, docentes, padres, madres de familia y a la comunidad educativa en general.

La más reciente de estas medidas es la decisión de la Secretaría de Educación, con base en un acuerdo del Concejo, la cual estableció que el próximo 15 de mayo se debe llevar a cabo en las instituciones educativas el Día de la Familia.

Precisamente en esa fecha se conmemora a nivel nacional el Día del Maestro y la Maestra. De esta manera, se invisibiliza la labor docente y se profundiza el ataque sistemático y directo a la educación pública estatal.

Además, días antes, el 10 de mayo, el Ministerio ha orientado al denominado Día E en las instituciones educativas, para el cual, la ADE ha llamado a desobediencia civil al magisterio.

El paro se da en un contexto nacional donde la mesa de negociación de los trabajadores estatales no avanza por la falta de voluntad del Gobierno y la mesa de Fecode con el Ministerio se estancó en el punto económico, por la excusa de siempre: “no hay plata”.