Por un Programa de Desarrollo con Enfoque Territorial por y para las comunidades
/ Jueves 7 de septiembre de 2017
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Organización campesina del Magdalena Medio que construye la Zona de Reserva Campesina del Valle del Río Cimitarra. Premio Nacional de Paz en 2010.
Como asociación campesina que durante más de 20 años hemos resistido junto a las comunidades campesinas del valle del Río Cimitarra y el sur del Bolívar, hemos trabajado por una paz construida desde los territorios a través del fortalecimiento de la economía propia y la superación del hambre de nuestras comunidades. Nuestro apoyo al proceso de paz entre las FARC – EP y el Gobierno Nacional ha sido constante, ahora en el marco de la implementación de los acuerdos pactados en La Habana, los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET) – contemplados en el punto 1 de la Reforma Rural Integral - significan un elemento clave para garantizar el desarrollo de la economía campesina y familiar como base de la soberanía alimentaría de la región.
Por ello consideramos que la participación de las comunidades y las organizaciones de carácter social de los territorios son necesarias para poder avanzar en una paz estable y duradera, que aporte en la transformación estructural del campo para asegurar el bienestar, el buen vivir y los derechos de los 7 municipios que comprende el PDET del sur del Bolívar como lo son Arenal, Cantagallo, Morales, San Pablo, Santa Rosa del Sur, Simití y Yondó (Antioquia).
De acuerdo a lo definido en el punto 1 de los Acuerdos, exigimos se nos dé a conocer lo que se viene avanzando en cuanto a la implementación del PDET, ya que consideramos que la metodología de implementación debe ser consensuada y discutida con quienes habitamos y trabajamos en el territorio. Por ello hacemos el llamado a la CSIVI, al equipo del PNIS, a las demás organizaciones sociales del Sur del Bolívar y a las administraciones de los 7 municipios a un encuentro que nos permita poner en común una agenda que nos facilite la ruta de implementación de manera integral y una metodología que incluya el sentir de nuestras comunidades, contando también con la participación como garantes de los organismos y organizaciones internacionales que han venido acompañando la construcción de paz en los territorios.