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Situación crítica en el sector lácteo
Euskal Herria: Con los tractores hasta Bilbo por unos precios que garanticen rentas dignas
Ganaderos de los cuatro herrialdes se manifestaron en Bilbo para pedir un cambio en las políticas que regulan el sector lácteo. Advirtieron de que desaparecerán porque los precios que les paga la industria no cubren los costes de producción y sentenciaron que sin alimentación propia estaremos a expensas de las multinacionales.
Nerea Goti / Sábado 6 de junio de 2009
 

Una veintena de tractores partieron a las 8.00 de ayer de Karrantza con destino a Bilbo, a donde llegaron a media mañana acompañados de camiones cisterna para la recogida de leche y otros vehículos que trabajan en el sector. Ya en la capital vizcaína, campesinos de los cuatro herrialdes y llegados de otros puntos de la cornisa cantábrica se agruparon en la Plaza Elíptica, desde donde partió la manifestación convocada por EHNE - Vía Campesina «por un cambio en las políticas agrarias, un precio digno en origen y freno a la prepotencia de la industria».

Los tractores mostraban lemas como «esnea gure jornala da», «Karrantza se muere, precio justo» o «bertan ekoiztu, bertan kontsumitu».

Dos vacas de raza frisona con las ubres a rebosar, también procedentes de Karrantza, abrieron la marcha tan fuera de lugar en medio de la gran urbe, sobre el asfalto y rodeadas de pitidos, sirenas y curiosos que no pararon de fotografiarlas, como muchos de los baserritarras (campesinos) que ayer hicieron el esfuerzo de dejar sus explotaciones para desplazarse allí donde se concentran las altas instancias políticas y económicas y advertir de que si las políticas lácteas actuales no cambian, el sector está condenado a desaparecer.

El responsable de la Ejecutiva de EHNE de Bizkaia, Mikel Kormenzana, ofreció el dato que refleja la crisis del sector: «los precios que se están pagando hoy en día están entre los 22 y los 26 céntimos por litro de leche y sólo el coste de producción ronda los 40-45 céntimos».

Prueba de que la rentabilidad ha caído es que, según precisó, en Euskal Herria se ha pasado de más de 13 mil explotaciones productoras de leche a 800, y culpó de este deterioro a los gobiernos, desde los ejecutivos forales hasta el comunitario.

«Desde hace mucho tiempo las instituciones apoyan sistemáticamente los modelos industriales de agricultura y ganadería y la leche es el mejor ejemplo, porque es donde más lejos han llegado», resaltó Kormenzana, quien criticó que «los políticos, como siempre, piensan no en los intereses de la sociedad, ni de los ganaderos ni de los consumidores, siguen pensando en que su futuro cuando salgan de la política estará en los puestos de dirección de las multinacionales a las que están apoyando».

En su alocución, al final de la marcha, frente la Teatro Arriaga, reconoció que los ganaderos son los primeros afectados porque su futuro es incierto, pero subrayó que nuestro país sólo produce un 20% de lo que consume «y a este paso seremos más dependientes de las multinacionales, que controlan no sólo la alimentación, sino a los países, a los pueblos, a los baserritarras y a los consumidores».

Hay una alternativa a la desaparición del sector lácteo, que según subrayó el responsable de EHNE, pasa por poner en marcha una herramienta pública como el observatorio de precios, al objeto de que ninguna industria pague precios por debajo de los costes de producción y acabar con los márgenes abusivos de la gran distribución, evitar que se utilice la leche como producto blanco y apostar por modelos de industria láctea vinculados a la producción y consumo locales.

Kormenzana reconoció que el sector necesita ayudas a corto plazo, pero precisó que «no queremos más limosnas, ni más miseria». «Necesitamos precios que remuneren nuestro producto y nos garanticen rentas dignas», subrayó, en una intervención que estuvo precedida de la del representante de Vía Campesina Pierre André Tombé, quien llamó a seguir luchando por otra política agraria.

Los ganaderos esperan ahora el resultado de la reunión que mantendrán en Lakua el día 9.