Agencia Prensa Rural
Mapa del sitio
Suscríbete a servicioprensarural

Indígenas del Cauca rechazan asesinato de dos líderes por parte del grupo "La Segunda Marquetalia"
 

Ante la permisividad del gobierno de Iván Duque, que es hoy, solo un espectador más del desangre que vive nuestra Colombia, asistimos a un gobierno fallido ante un Estado fallido. Situación que solo le sirve a quienes por más de 200 años han tenido el poder y que para seguir soportando y ostentando el poder condujeron en los últimos 53 años un conflicto armado sin cuartel, sin ninguna intención de buscarle solución alguna.

Hace 4 años, nos ilusionamos con una paz estable y duradera, a partir de la firma del acuerdo entre insurgentes de las FARC-EP y Gobierno nacional, pero para quienes habitamos la ruralidad de este país, este pasó hacer algo efímero, un solo sueño y que nos tocó despertar y empezar a sembrar en nuestra madre tierra, sus cuerpos de más de 600 entre hombres y mujeres que fueron asesinados y que su único pecado fue siempre luchar y trabajar por la paz para este país.

Como Movimiento de los Sin Tierra Nietos de Manuel Quintín Lame, fuimos una más de las organizaciones que siendo filiales de la CONPI y de CENPAZ trabajamos, día y noche para que se lograra un acuerdo que reflejara en él, el ideario de paz para los pueblos indígenas, afros y pueblos étnicos, hecho que se ve reflejado en el capítulo étnico y que el Gobierno hoy está dejando morir, porque no tiene la voluntad política de hacer que se cumpla a través de su implementación.

Hoy nuestros campos se cubren de sangre y lágrimas, de quienes lloramos la partida de nuestros seres queridos, el asesinato selectivo y sistemático de nuestros líderes y lideresas, es un hecho que rechazamos con total vehemencia. La muerte no puede ser la salida para resolver los problemas sociales de este país por el contrario ahonda más la herida del odio y del rencor.

Por eso hoy rechazamos el vil crimen de nuestra compañera y madre Amparo Guejia Mestizo y de su hijo Juan Pablo Digue Guejia, ambos militantes del MST Nietos de Manuel Quintín Lame, reconocemos en ellos sus aportes a nuestro movimiento y los reivindicamos como nuestros y por ello vivirán en nuestras memorias.

Les decimos a quienes se dicen Revolucionarios y de la Segunda Marquetalia, grupo que se adjudicó el vil crimen, que parecen más un grupo paramilitar al servicio del Gobierno que un grupo que dice luchar por las nobles causas del pueblo. Ni por las curvas se ven los idearios de Manuel Marulanda, ni de Ciro Trujillo y mucho menos la de Jacobo Arenas, personas que sí se pueden llamar Marquetalianos, personas que ante todo buscaron el dialogo y la búsqueda incansable por la paz, hecho que siempre busco Manuel y quienes lo secundaron lo mantuvieron, como lo fue Alfonso Cano. Pero ustedes solo son un grupo más de criminales, sin ideas.

Desde ya instamos a todos los que se dicen ser revolucionarios, respeten la vida sea de quien se sea y ante todo respeten el gobierno propio y la autonomía de los cabildos en cabeza del CRIC y la ACIN y organizaciones sociales, los cuales son los únicos dignos ejemplos de lucha y resistencia ante el atropello de este Estado y Gobierno. Con sus actos no defienden al pueblo, al contrario lo someten cada día más y sus actos demuestran que solo les interesa defender al Gobierno que ustedes dicen combatir.
Nosotros, como Movimiento de los Sin Tierra Nietos de Manuel Quintín Lame, denunciamos y le exigimos al Estado y Gobierno colombiano, así como a la Fiscalía General de la Nación, Procuraduría Nacional defensoría del pueblo, se garantice el respeto y derecho a la vida de cada comunero y comunera de este país, además abrir dialogo con el ELN y los Grupos disidentes de las FARC como también el desmonte inmediato del paramilitarismo. Le pedimos a la ONU, MAPP OEA y organizaciones defensoras de derechos humanos le exijan al gobierno de Iván Duque Márquez cumpla con lo acordado en el acuerdo de habana y ante todo la implementación del capítulo étnico.

DE LA LUCHA DE LOS PUEBLOS, ES NUESTRA LIBERACIÓN
MOVIMIENTO DE LOS SIN TIERRA: NIETOS DE MANUEL QUINTÍN LAME