Opinión
Carta pública: "Quiero ver su caída pronto"
"Hoy siento dolor y vergüenza de un país que elige gente como ustedes para que los gobierne. Señores traidores, charlatanes, toscos defensores de la ignorancia".
/ Sábado 30 de abril de 2022
|
Señores:
Presidente Iván Duque, señor candidato Fajardo, señor candidato alias Fico:
¿Donde está la plata de las regalías de esas multinacionales que desangran el país? ¿Donde está el progreso que nos vendieron en su campaña? ¿Donde está la responsabilidad social y ambiental de estas compañías? ¿Donde están las calles, las carreteras, los acueductos, la salud y el aseo, las escuelas y todo lo se suponía les iba a llegar a los pobres con la llegada de estas empresas benefactoras? ¿Donde está el apoyo a los campesinos, a los obreros, a los indígenas, a las mujeres, a los niños?
¿Dónde están los empleos? Sigo sin empleo, bilingüe, posgraduado, y millones igual que yo...
Y lo que yo veo a mi alrededor es un país más pobre, más abandonado, más violento, eso sí, por donde pasan estas empresas que explotan el carbón, el petróleo, el coltán, el oro, otros minerales y el agua impunemente, las tierras expropiadas, la gente desplazada... No queda nada más que contaminación, mercurio en los ríos, corrupción, desidia, muerte y pobreza.
El Chocó arrendado por partes a madereras japonesas, el maldito fracking...
¡Las cuentas engordando inútilmente en paraísos fiscales!
Y usted, presidente, y ustedes, candidatos, salen con sus estadísticas falsas, optimistas y maquilladas a decirnos que hoy somos menos pobres y estamos más seguros y más cerca de la paz, la justicia y el desarrollo. Yo no veo eso por ninguna parte.
Para la paz y la igualdad debe haber redistribución de tierras, equidad, salud y educación, debe haber una distribución equitativa de la riqueza y de los recursos, justicia social, un nuevo pacto para reconstruir el Estado-Nación...
Y yo lo que veo es a políticos y pseudopolíticos (politiqueros) corruptos, asesinos libres ocupando cargos públicos, gastando descaradamente la plata de los colombianos en lujos innecesarios, apoderándose de todo. Veo que no hay institución que se salve...
Creí que la pandemia sería el escenario perfecto para la reconciliación, la solidaridad, el respeto, el reconocimiento mutuo, el valor de la diversidad... Pero, por el contrario, se convirtió en la forma de robar más, con mas descaro y desfachatez. No veo servidores públicos, sólo buitres carroñeros y aves de presa dispuestas a depredar lo poco que nos queda.
Y ustedes salen con su optimismo de mierda a decirnos que todo es mejor ahora, como si no fuese obvio lo contrario. Cuando los que pensamos en justicia y equidad somos perseguidos y amenazados constantemente bajo su complicidad y su silencio.
Cuando sus legisladores también han sido comprados y sirven a sus intereses de una endemia colonialista, violenta.
Cuando la Policía no ha sido capaz de interiorizar la necesidad y, además, su razón de existir: son servidores públicos... ¡no privados! Actúan sólo para defender sus bienes y los de sus secuaces, y apalear cualquier expresión disonante con las élites hegemónicas.
Sí, señor presidente, usted; también ustedes, candidatos... y su corte de malos bufones malos (no es redundancia), no son más que unos farsantes, aprovechados, incumplidos y traidores.
Por eso me alegra que se les caiga la estantería, que bloqueen las carreteras, que se detenga el campo, las fábricas y toda la economía y que se le caiga el fraude con el que llegó a presidente y los otros a candidatos, todos sus planes corruptos y llenos de eufemismos.
Porque ustedes y su gente han demostrado no tener ningún pudor, ningún escrúpulo y ningún respeto por la vida y por el mandato del pueblo, ni la Constitución. Ustedes que mienten todos los días ante los medios y ni siquiera pestañean, ustedes que ilusionan a la gente con su discursito de publicista engañoso al servicio de las multinacionales, de corporaciones fantasma que son gigantes pero jamás dan la cara y tienen miles de empleados y cientos de millones de esclavos posmodernos. Ustedes que son unos lacayos de imperios ajenos a nuestra naturaleza y nuestro territorio... Y obedecen la voz de su amo, el gringo de la CIA, la DEA y demás fachadas corporativas sostenidas con capitales financieros que nos han venido robando desde siglos atrás.
No crean que ya nos vencieron, porque la revolución de los pobres y los oprimidos está cada vez más cerca... Le llegará su momento histórico a menos que haya una verdadera reconciliación, un nuevo pacto social incluyente de las diversidades, cumplimiento, respeto del acuerdo de paz... Para qué sembrar más guerra cuando bien podemos hacer que alcance para todas las personas y podamos vivir en equilibrio con lo que queda de naturaleza (es más: es mucho lo que nos queda por reforestar y recuperar).
Se les va a caer esa doctrina de seguridad nacional que ha justificado masacres incontables y atrocidades terribles.
No los vamos a dejar dormir, su conciencia despertará y no los dejará dormir, porque ustedes y los suyos merecen un castigo divino, merecen algo mas allá de que les rompan las ventanas...
Merecen despertar y tomar conciencia de los beneficios de la paz para nuestro territorio...
Hoy siento dolor y vergüenza de un país que elige gente como ustedes para que los gobierne. Señores traidores, charlatanes, toscos defensores de la ignorancia.
Tengo dolor de patria, señor presidente y señores candidatos, quiero ver su caída pronto, o más bien: quiero ver caer esa mafia que ha pretendido apoderarse de cosas que no le corresponden y causar dolor y muerte por doquier...
Porque estoy herido, en dolor, por pensar diferente...
Libertad, insomnio y rebelión...
Mauricio López-Arenas