Un cura del Instituto Lorenzo Massa insiste en reclamar la posesión de un predio de 250 hectáreas ubicado en la comunidad autóctona de El Nogalito. Por la resistencia indígena, el sacerdote dispuso la expulsión del cacique de este pueblo originario, quien trabajó durante 12 años en ese establecimiento educativo. El lunes, integrantes de la comunidad escracharán al párroco para exigirle que se retracte públicamente.
Pese a la existencia de leyes que protegen la tenencia de sus tierras por parte de las comunidades originarias, la historia vuelve a reescribirse con el mismo espíritu con que los pueblos autóctonos vienen siendo sometidos desde hace cinco siglos. Igual que desde entonces, sectores de la Iglesia Católica se ven metidos en medio de un aparente nuevo intento de abuso sobre los despojos que aún luchan por mantener los pueblos indígenas.